Se trata del proyecto favorito del presidente de Estados Unidos, el que lo llevará a los libros de Historia: el acelerador de partÃculas más grande del mundo, con el que se podrán poner a prueba las teorÃas sobre el origen del universo. Pero el acelerador está situado bajo el antiguo cementerio de una reserva de indios navajo, un suelo que también codician unos especuladores sin escrúpulos. Estos no dudarán en recurrir a un célebre predicador mediático para que caliente los ánimos y acuse a los cientÃficos de blasfemos. Mientras tanto, en el gran ordenador del laboratorio comienzan a recibirse misteriosos mensajes. ¿Es Dios quien se oculta en el disco duro del superordenador?¿PodrÃa el acelerador de partÃculas más potente de la historia revelar el misterio de la creación?Douglas Preston, Massachusetts, 1956. Se licenció en Lengua y Literatura inglesa y es colaborador habitual de The New Yorker. Trabajó durante ocho años en el Museo Americano de Historia Natural, época en la que Lincoln Child le publicó su primer libro. Este fue el comienzo de una de las colaboraciones literarias más exitosas de los últimos años. Entre las últimas novelas escritas por ambos autores, y publicadas por Plaza & Janés y DeBolsillo, están: Los asesinatos de Manhattan, Naturaleza muerta, La mano del diablo.