En el principio eran los griegos. No podÃa plantearse una enciclopedia de filosofÃa sin atender a la filosofÃa antigua y, dentro de ella, a la griega. Fueron los jónicos, en el siglo VI a.C., los que no se contentaron, a la hora de preguntarse por las cosas de la vida, con explicaciones mÃticas. QuerÃan razones. Asà se produjo el paso del mito al logos.
Este volumen ofrece una sÃntesis del momento matinal de la filosofÃa, que abarca ocho siglos. Comienza preguntándose por qué ahÃ, en Jonia, por qué nombres como Tales de Mileto, inauguran la historia del pensar filosófico. Se nos dirá que porque ahà se da una democratización del saber y de la palabra y la difusión de la escritura. Eso convierte a Grecia en un lugar privilegiado para la reflexión crÃtica, en el marco de una cultura ilustrada y muy atenta a los conocimientos culturales que venÃan de Oriente.
Asà aparece el 'philosophos' que desplaza al 'sophos' como maestro de la verdad. Ese especimen humano, una vez nacido, no ha dejado de desarrollarse. Pero hasta para eso tiene que visitar una y otra vez Grecia.
No hay que olvidar que para reconstruir ese momento originario de la filosofÃa sólo nos quedan -salvo excepciones- fragmentos. Eso quiere decir que la interpretación es fundamental. Pues bien, el lector verá que, gracias a la agudeza interpretativa, hemos podido rectificar prejuicios y tomarnos en serio a los cÃnicos, epicureos o escépticos. El carácter sintético del libro da la mano a una voluntad innovadora.
Una visión, pues, panorámica de la filosofÃa griega en sus tres fases clásicas: la preplatónica, la de Platón y Aristóteles y la de las escuelas posteriores del helenismo y el Imperio romano.