Ricardo M. Rojas se concentra en las causas de la inflación, recordando que «lo que se infla es el dinero, no los precios». De este modo, la habitual explicación de la inflación como el «incremento de los precios», encierra un error que ha costado muy caro a las sociedades modernas. En los primeros capÃtulos, Rojas desarrolla el concepto y origen del dinero, de los precios, de la inflación y sus causas, para concluir que en sistemas de papel moneda de curso forzoso emitidos por el Estado, el único responsable de la inflación es el gobierno, que al disponer el incremento injustificado en la cantidad de dinero circulante, deprecia su valor adquisitivo y distorsiona los precios relativos. Tras la explicación económica, ensaya la explicación jurÃdica sobre la responsabilidad del gobierno por sus actos, y concretamente los motivos por los cuáles los funcionarios intervinientes deberÃan ser responsables por la emisión excesiva. Tal exceso deberÃa estar previsto en el Código Penal como delito, especÃficamente como una forma de falsificación o adulteración de dinero. Concluye con una propuesta concreta del nuevo