Siglo XII.
Berengaria, a los 18 años, huérfana y sola, demuestra a la Orden del Temple su valentía y coraje, y la aceptan como Dama Templaria.
Conquista varias poblaciones de Levante y se convierte en una líder. Sus victorias la convierten en amiga del Rey de Aragón.
No consiguen doblegarla Emires, Califas o Reyes árabes, ni obispos cristianos.
Es gran estratega, sorprendiendo a sus seguidores y enemigos.
La novela es muy intensa, con acción continuada, sorprendiendo los sucesos que se van acumulando unos tras otros.
La primera parte finaliza con la toma de Valencia y la renuncia de la Templaria a su pertenencia a la Orden.
La segunda parte relata la historia de otra Berengaria que continúa con su mismo valor y osadía. Su hija.
A los dieciocho años, demuestra que es digna descendiente de la Dama Templaria y ayudando al Rey de Aragón, hace conquistas en Carcassonne, Mallorca y Valencia.
El resultado final, con ciertos acontecimientos relacionados con Pedro II y su hijo Jaime I, dan a la novela un giro inesperado.
No es novela histórica. Son relatos que describen la astucia, valor, fuerza e ingenio que tuvieron que demostrar unas mujeres en una época y mundo que estaba reservado a los hombres.
Los lugares son reales y conocidos por el autor.
No es posible saber qué habría ocurrido si mujeres como Berengaria hubieran tenido poder de gobierno porque la Historia ya estaba escrita y solo puede ser variada con la imaginación.
La Historia no se puede variar ni manipular, a menos que nuestra mente lo desee.
