La garantÃa efectiva del "Trabajo Decente o digno" del hombre comienza por asegurar que las condiciones de trabajo respeten unas condiciones laborales adecuadas, asà como su dignidad (que remite al respeto de los derechos fundamentales genérico e inespecÃficos y a los sociales o especÃficos de la persona que trabaja; ya que la "dignidad" adquiere un valor reconstructivo y de fundamentación del conjunto de los derechos fundamentales). Actualmente, se plantean múltiples dudas en torno al respeto de estos derechos y ello es por diversas razones, de un lado, el fenómeno de la globalización, pero, sin embargo, tampoco se deben olvidar las nuevas formas de organización del trabajo y control de la efectiva prestación de servicios que se realiza a través del uso, en ocasiones abusivo, de las nuevas tecnologÃas de la información. Lamentablemente, el sinfÃn de reformas estructurales y los contantes vaivenes en la doctrina judicial están impactando negativamente en la praxis jurÃdico-social. Por lo que, al término, los trabajadores se ven situados en una situación de cierta vulnerabilidad y clara desprotección social.