Antonio de Trueba y Camilo de Villabaso fueron dos interesantes analistas de la sociedad vasca de la pasada centuria. En ambos casos su actividad se proyectó hacia diferentes campos: la política, la administración, la actividad periodística, las obras históricas y literarias o el ensayo de contenido social. Hombres polifacéticos preocupados por su realidad más próxima, su conocimiento de otras sociedades y su interés por los cambios producidos en los países de nuestro entorno cultural les resultaron un útil referente para el análisis y la comprensión de los cambios económicos, políticos, sociales y culturales que les correspondió vivir.
