Seguiré escribiendo acerca de lugares sagrados y criaturas excepcionales, seguiré cartografiando al alguien que llamo yo, cuando me los encuentre si es que los encuentro. Están por todas partes si has llegado a la convicción de que, como decía un personaje de Vladimir Nabokov, el mundo es un chachorro que está deseando que alguien se ponga a jugar con él. No hay ni ha habido jamás en parte alguna un pueblo sin relatos, sin historias que puedan contarse y escribirse. La colección Calembé intenta ser escaparate de un género en continuo crecimiento, recuperando los lazos que unen nuestra tierra con latinoamericana y alternando la publicación de cuentos y escritores de ambas orillas: En definitiva, literatura viva y una magnifica invitación a las más intensa de las lecturas.
